En Cartas de amor de Dios, Glenys Nellist invita a los niños a interactuar con el Señor de una forma profundamente personal. Estos libros para niños incluyen una nota de parte de Dios con un espacio para que ellos pongan sus nombres después de cada historia bíblica. Personalizar la verdad escritural ayuda a sus jóvenes lectores a entender que la Biblia no es solo un libro de cuentos. Se les enseña que el Señor quiere tener una relación personal con ellos y que les habla a sus inmensamente amados hijos a través de las Escrituras.
Le compré el libro a mi sobrino y escribí su nombre en los espacios al principio de cada nota de Dios. Encantado de reconocer su nombre, dijo: «¡Dios también me ama!».
Cuando Dios habló a los israelitas a través del profeta Isaías, dirigió la atención de ellos hacia el cielo, y afirmó que Él controla «su ejército» de estrellas (Isaías 40:26), determina el valor particular de cada una y las guía con amor. Aseguró que no olvidará ni perderá ninguna estrella… ni ningún amado hijo que esculpió con un propósito intencional y un amor eterno.
A medida que nos gozamos en las promesas y las declaraciones íntimas del Señor todopoderoso en las Escrituras, podemos escribir nuestros nombres, y confiar y declarar deleitados como un niño: «¡Dios también me ama!».