Mitch Albom, autor de The Five People You Meet in Heaven (Las cinco personas que encontrarás en el cielo), dijo que se le ocurrió la idea para su libro cuando imaginó cómo sería el cielo si algunas de las personas en las que causamos impacto en la tierra explicaran nuestra vida cuando las encontráramos allí.
El libro de Albom ofrece una profunda comprensión de cómo intervenimos involuntariamente en las vidas de otras personas. Pero, para los cristianos, nuestro gozo final en la eternidad no proviene de otras personas, sino de nuestro Señor y Salvador. El cielo es un lugar real que Jesús está preparando para nosotros ahora. Y, cuando lleguemos allí, nos regocijaremos al encontrarnos con el Cristo vivo (Juan 14:2-3; 2 Pedro 3:13).
Sin embargo, este encuentro con Jesús también incluirá rendir cuentas por la vida que llevamos en la tierra. Se nos dice a los creyentes: «Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo» (2 Corintios 5:10). Su evaluación sabia y justa nos mostrará lo bien que hemos amado a Dios y a nuestro prójimo (Mateo 22:37-40).
No sabemos quiénes serán las primeras cinco personas con las que nos encontremos en el cielo, pero sí sabemos quién será la primera de todas: el Señor Jesús.