Categoría  |  Nuestro Pan Diario

No desistas

En 1986, John Piper casi deja de ser pastor de una iglesia numerosa. En aquel momento, admitió: «Estoy tan desanimado, tan vacío. Siento como si hubiera enemigos por todas partes». Pero no desistió, y Dios lo utilizó para liderar un ministerio floreciente que, con el tiempo, se extendería más allá de su congregación.

Sabiduría y gracia

El 4 de abril de 1968, Martin Luther King Jr., líder de los derechos humanos en Norteamérica, fue asesinado, lo que dejó a millones de personas indignadas y sin esperanza. En otra ciudad, Robert Kennedy hablaba ante una multitud de afroamericanos. Como muchos no se habían enterado de la muerte de King, tuvo que darles la trágica noticia. Los instó a mantener la calma, reconociendo el dolor de ellos y el suyo propio tras la muerte de su hermano, el presidente John F. Kennedy.

El herrero y el rey

En 1878, cuando el escocés Alexander Mackay llegó como misionero a la actual Uganda, abrió una herrería en una tribu liderada por el rey Mutesa. Los aldeanos observaban extrañados a este extranjero, ya que todos «sabían» que ese era trabajo de mujeres. En aquella época, los hombres de aquel país jamás trabajaban con las manos; solo capturaban esclavos y los vendían. Sin embargo, allí estaba ese extraño fabricando herramientas agrícolas.

Demasiado cerca

Donde nací, el clima severo es habitual desde principios de la primavera hasta finales del verano. Recuerdo una noche cuando el cielo relampagueaba con nubes oscuras y el pronóstico del tiempo advertía que se acercaba un tornado, y quedamos sin luz. De inmediato, con mis padres y mi hermana, bajamos la escalera de madera para guarecernos en un cuarto detrás de la casa, donde solíamos quedarnos hasta que pasaba la tormenta.

La galería de Dios

El Salmo 100 es como una obra de arte que nos ayuda a honrar a nuestro Dios invisible. Aunque el objeto de la adoración no puede verse, su pueblo lo da a conocer.

Sígueme

Los gimnasios ofrecen diferentes programas para quienes desean adelgazar o mantenerse saludables. Hay uno que solo se ocupa de personas que quieren perder, como mínimo, unos veinte kilos y desarrollar una vida sana. Una mujer que asistía a uno de esos gimnasios dijo que no iba más porque sentía que algunos la miraban y criticaban su cuerpo fuera de forma. Ahora hace ejercicio cinco días por semana y está logrando sus objetivos en un entorno positivo y acogedor.

Sorprendido por la gracia

Una mujer se quedó dormida en el sofá después de que su esposo se fue a acostar. Al rato, un intruso entró a hurtadillas en la casa por una puerta que habían dejado abierta; fue a la habitación donde dormía el hombre y cargó el televisor. En ese momento, el hombre se despertó y, al ver una figura, susurró: «Querida, ven a acostarte». El ladrón, asustado, dejó el televisor, tomó un montón de dinero del tocador y salió corriendo.

Dios es mi fortaleza

Los antiguos soldados babilonios no tenían nada de caballeros. Eran despiadados, fuertes y feroces, y atacaban como un águila atrapa su presa. No solo eran poderosos, sino que también estaban orgullosos de serlo. Podría decirse que adoraban sus habilidades para el combate. Como dice la Biblia: «[hacían] de su poder su dios» (Habacuc 1:11 LBLA).

¡Sorprendido!

El artista italiano Miguel Ángel era conocido por su temperamento exaltado y su técnica heterodoxa. Usaba obreros comunes y corrientes como modelos para sus santos, y lograba que quienes miraban sus cuadros se sintieran parte de la escena. La Cena en Emaús muestra a un posadero de pie entre Jesús y sus dos seguidores. Estos estaban sentados a la mesa cuando reconocieron que el Señor resucitado era quien estaba con ellos (Lucas 24:31). Uno de ellos va a ponerse de pie, mientras que la mano abierta del otro expresa su asombro.

Comienzo pascual

Siempre me ha intrigado un detalle de la historia de la Pascua. ¿Por qué Jesús mantenía las cicatrices de su crucifixión? Se supone que podría haber tenido el cuerpo resucitado que quisiera, pero escogió uno que podía identificarse; especialmente, por las marcas que era posible ver y tocar. ¿Por qué?