Silencio
Hubo un gran revuelo en la aldea al ver unos camiones de socorro que pasaban por el «camino» destrozado por la lluvia. De repente, el convoy divisó la casa del alcalde… aunque este vivía lujosamente en otra parte, mientras que a su pueblo le faltaban las cosas básicas para vivir.
¿Qué queremos?
«Vi desde un coche tirado a caballos hasta un hombre que caminaba sobre la luna», le dijo el anciano a su nieta. Pero, luego, reflexionó: «Qué rápido pasa todo…».
Ni un solo gorrión
Mi madre, tan digna y correcta toda su vida, estaba ahora en la cama de un geriátrico, cautiva de la ancianidad debilitante. Su estado en deterioro contrastaba con el hermoso día primaveral que danzaba tentador al otro lado de la ventana.
¿Defender a Dios?
Las pegatinas antiDios del auto le llamaron la atención a un profesor universitario. Como había sido ateo, el profesor pensó que, quizá, el dueño quería enojar a los creyentes. «El enojo ayuda al ateo a justificar su ateísmo», explicó. Después, advirtió: «Demasiadas veces, el ateo obtiene exactamente lo que busca».
Solo un toque
A Kiley le encantó la idea de ir a una zona remota de África oriental para ayudar en una misión médica, pero estaba intranquila. No tenía experiencia médica. Aun así, podía proporcionar primeros auxilios.
El don de dar
Un pastor le propuso un desafío inquietante a su iglesia: «¿Qué sucedería si le diéramos a alguien necesitado el abrigo que estamos usando?». Entonces, se sacó su propio abrigo y lo colocó al frente de la iglesia. Decenas de otras personas siguieron su ejemplo. Esto fue durante el invierno, así que el viaje a casa no fue muy cómodo ese día. Sin embargo, para muchas personas necesitadas, esto significó un cálido abrazo.
La valentía de Kossi
Mientras esperaba bautizarse en Togo, Kossi se inclinó a levantar una figura de madera. Su familia había adorado el objeto por generaciones. Ahora, observaron cómo él lo arrojaba a una pira preparada para la ocasión. Ya no sacrificarían sus mejores pollos a ese dios.
Dos retratos
L a orgullosa abuela sostenía con fuerza dos fotografías mientras las mostraba a sus amigos en la iglesia. Una era de su hija, en Burundi, África. La otra, de su nieto recién nacido. Sin embargo, la hija no sostenía al bebé, ya que había muerto al dar a luz.
Todo de mí
Al joven Isaac Watts no lo satisfacía la música de la iglesia; entonces, su padre lo desafió a escribir algo. Y lo hizo. Su himno La cruz sangrienta al contemplar es unos de los himnos evangélicos más conocidos, traducido a muchos idiomas.
Mentiritas y gatitos
L a madre vio que Elías, de cuatro años, se alejaba corriendo de los gatitos recién nacidos. Ella le había dicho que no los tocara. Entonces, le preguntó: «Elías, ¿tocaste los gatitos?».