Belleza oculta
Nuestros hijos necesitaron cierta persuasión para aceptar que valía la pena usar el equipo de snorkel para ver debajo de la superficie del Mar Caribe. Sin embargo, después de sumergirse, salieron extasiados: «¡Hay miles de peces de todos colores! ¡Es hermoso! ¡Nunca vimos peces tan coloridos!».
La luz del mundo
Una de mis obras de arte preferidas está en la capilla de la Universidad de Keble, en Oxford, Inglaterra. La pintura, La luz del mundo, obra del artista inglés William Holman Hunt, muestra a Jesús sosteniendo un farol en la mano y llamando a la puerta de un hogar.
El consuelo de un amigo
Una mamá se sorprendió al ver a su hija embarrada desde la cintura para abajo al llegar a casa de la escuela. La niña explicó que una amiga se había resbalado y caído a un charco de lodo. Mientras alguien corría a buscar ayuda, ella sintió lástima por su amiga, así que se sentó en el charco con su amiga hasta que llegó una maestra.
Aguardar con expectativa
Cada 1.° de mayo, en Oxford, Inglaterra, una multitud se reúne por la mañana temprano para recibir la primavera. A las 6, el Coro de Magdalen College canta desde arriba de la Torre Magdalen. Miles aguardan con expectativa que se vaya la noche y comiencen el canto y el repiquetear de las campanas.
Fe, amor y esperanza
Mi tía Kathy cuidó a su padre (mi abuelo) en su casa durante diez años. Cocinó y limpió para él mientras él se manejaba solo, y cumplió el papel de una enfermera cuando su salud se deterioró.
Caminar sobre el agua
Durante un invierno especialmente frío, me aventuré a ir al Lago Michigan para verlo congelado. Envuelta con ropa abrigada, en la playa donde habitualmente tomaba sol, la vista era espectacular. El agua estaba en verdad congelada y con olas que creaban una obra maestra de hielo.
¿No alcanza?
Mientras volvíamos a casa después de la iglesia, mi hija iba en el asiento trasero disfrutando sus galletitas con forma de peces mientras mis otros hijos le rogaban que las compartiera con ellos. En un intento de redirigir la conversación, le pregunté a la acaparadora: «¿Qué hiciste en la clase hoy?». Contestó que había hecho una cesta con panes y peces porque un niño le había dado a Jesús cinco panes y dos peces para que Él alimentara a más de 5.000 personas (Juan 6:1-13).
Gratitud creciente
¿Te gustaría cultivar un mayor sentimiento de gratitud? George Herbert, poeta británico del siglo xvii, en su poema Gratefulness [Gratitud], alienta a sus lectores a alcanzar esa meta: «Tú, que me has dado tantas cosas, dame una más: un corazón agradecido».
Herbert reconocía que lo único que necesitaba para ser agradecido era, simplemente, tomar conciencia de las bendiciones que Dios ya le…