Recordar y celebrar
El 6 de diciembre de 1907, varias explosiones sacudieron una comunidad del estado de Virginia Occidental, en Estados Unidos, produciendo uno de los peores desastres en la industria minera del carbón. Unos 360 mineros murieron, y se estima que quedaron 1.000 hijos sin padre. Los historiadores sostienen que el servicio conmemorativo se transformó en el semillero para la celebración del Día del Padre en Estados Unidos. De una gran pérdida, surgió la conmemoración… y con el tiempo, la celebración.
Esperanza en el dolor
Mientras el taxista conducía hacia el Aeropuerto Heathrow de Londres, nos contó una historia. Había llegado solo a Reino Unido a los trece años, buscando escapar de la guerra y las privaciones. Ahora, once años después, tiene su familia y puede mantenerla de formas inviables en su tierra natal. Pero lamenta seguir separado de sus padres y hermanos, y dice que su vida no estará completa hasta que se reencuentre con los que dejó.
La vida de paz
En Perth, Australia, hay un lugar llamado Shalom House [Casa de paz], donde hombres que luchan contra las adicciones pueden encontrar ayuda. Allí conocen a miembros del personal quienes les presentan la shalom [paz, en hebreo] de Dios. Vidas aplastadas bajo el peso de las drogas, el alcohol, el juego y otras conductas destructivas están siendo transformadas por el amor de Dios.
Agua donde la necesitamos
El lago Baikal, el más profundo del mundo, es inmenso y magnífico. Mide 1.600 metros de profundidad y casi 636 por 79 kilómetros de ancho, y contiene un quinto de toda el agua potable superficial del planeta. Pero es muy difícil llegar allí, ya que está ubicado en Siberia, una de las regiones más remotas de Rusia. Con la desesperante necesidad de agua que hay, es irónico que semejante reservorio esté escondido en un lugar adonde pocas personas pueden acceder.
Lo que no se puede ver
Los historiadores dicen que la era atómica comenzó el 16 de julio de 1945, cuando la primera arma nuclear se detonó en un desierto remoto de Nueva México, pero el filósofo griego Demócrito (aprox. 460-370 a.C.) ya estaba explorando la existencia y el poder del átomo mucho antes de la invención de alguna cosa que pudiera siquiera ver esas pequeñas partículas del universo. Demócrito captaba más de lo que podía ver, y el resultado fue la teoría atómica.
Considerar el precio
Las obras de Miguel Ángel exploraban muchas facetas de la vida de Jesús. En la década de 1540, bocetó una pieta (un dibujo de la madre de Jesús sosteniendo el cuerpo del Cristo muerto) para su amiga Vittoria Colonna. Dibujado en tiza, el boceto muestra a María mirando al cielo mientras abraza a su hijo inerte. Detrás de María, la viga vertical de la cruz reza las siguientes palabras del Paraíso, de Dante: «Nadie piensa en la cantidad de sangre que cuesta». Al contemplar la muerte de Jesús, debemos considerar el precio que pagó.
Un corazón fuerte
El Dr. Paul Brand, coautor con Philip Yancey del libro Asombrosa y maravillosamente hecho, señala: «El corazón de un colibrí pesa unos pocos gramos y late 800 veces por minuto; el de una ballena azul pesa media tonelada y late solo diez veces por minuto, y puede oírse desde unos tres kilómetros. En comparación con ellos, el corazón humano parece lentamente funcional, pero cumple su cometido, latiendo 100.000 veces por día (65 a 70 veces por minutos) y sin descanso para que la mayoría de nosotros viva 70 años o más».
Como Jesús
Cuando era niño, el teólogo Bruce Ware estaba frustrado de que 1 Pedro 2:21-23 nos llamara a ser como Jesús. En su libro El Hombre Cristo Jesús, escribió sobre su exasperación juvenil: «No es justo, decidí. En especial cuando el pasaje dice que sigamos las pisadas de uno que “no hizo pecado”. Era totalmente disparatado […]. No podía entender que Dios pretendiera que lo tomáramos en serio».
Los lugares más profundos
Víctor Hugo (1802-1885), poeta y novelista durante las revueltas sociales y políticas del siglo xix en Francia, tal vez sea más famoso por su obra clásica Los miserables. Más de un siglo después, una adaptación musical de su novela se convirtió en una de las producciones más populares de nuestra era. Esto no debería sorprendernos. Una vez, dijo: «La música expresa lo que no se puede decir y aquello sobre lo que es imposible guardar silencio».
El lenguaje de la cruz
El pastor Tim Keller dijo: «Nadie aprende quién es por lo que se le dice. Hay que mostrárselo». En un sentido, es como el dicho: «Las acciones hablan más fuerte que las palabras». Los cónyuges se demuestran aprecio al escucharse y amarse. Los padres manifiestan cuánto valoran a los hijos al amarlos y cuidarlos. Los entrenadores les transmiten a los deportistas sobre el potencial que tienen al invertir en su desarrollo. Y los ejemplos continúan. Asimismo, otra clase de acciones comunican mensajes mucho más oscuros.