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Articles by Anne Cetas

Nada de religión

Me llamó la atención una publicidad de una iglesia en la radio: «Por lo que has oído del cristianismo, tal vez no te interese la religión. Bueno, quizá te sorprenda… a Jesús tampoco le interesaba, pero sí enfatizaba las relaciones interpersonales y la enseñanza de amarnos unos a otros». Agregaba: «Tal vez no te gusten algunas cosas de nuestra iglesia, pero te ofrecemos una comunión auténtica. Además, estamos aprendiendo a amarnos los unos a los otros y a Dios. Tu visita será bienvenida».

¿Lo hago o no lo hago?

¿Lo hago o no lo hago? Marilina se enfrentó con esta pregunta cuando plantó un retoño el verano pasado. El vendedor le aconsejó: «Colóquele una estaca durante un año para que lo sostenga durante los vientos fuertes. Después, quítela para que las raíces se hagan profundas». Pero un vecino le dijo: «Ponerle una estaca puede hacerle más mal que bien. El árbol necesita fortalecer sus raíces desde el principio. Si no, tal vez no lo haga nunca. Sin la estaca durará más tiempo».

Mirar hacia abajo

Después de una cirugía menor de ojos, la enfermera me dijo: «No mire hacia abajo durante las próximas dos semanas. No cocine ni limpie». ¡La última parte de las instrucciones era más fácil de cumplir que la primera! Las incisiones necesitaban cerrarse, y ella no quería que les aplicara ninguna presión innecesaria al mirar hacia abajo.

Corina

El invierno pasado, estábamos ayudando a acomodar cajas con materiales en un evento de Nuestro Pan Diario, cuando Corina nos saludó. Era a mediados de la mañana, y ella estaba segura de que debíamos tener hambre y sed. Le dije que estábamos «bien», pero ella respondió: «Yo sé que están bien, pero necesitan comer algo». Pocos minutos después, regresó con un poco de agua fresca y algo para comer.

¿Qué es el amor?

Cuando a los niños se les pregunta «¿qué es el amor?», dan algunas respuestas grandiosas. Noelia, de siete años, dijo: «Amor es cuando le dices a un chico que te gusta su camisa, y después él la usa todos los días». Rebeca, de ocho años, respondió: «Como mi abuela tiene artritis, ya no puede inclinarse para arreglarse las uñas de los pies. Entonces, mi abuelo se las arregla siempre, aun después de que sus manos también se enfermaron de artritis. Eso es amor». Jésica, también de ocho años, concluyó: «Uno no debe decir “te amo”, a menos que sea cierto. Pero si realmente es así, hay que decirlo muchas veces. La gente se olvida».

Crear tu vida

El consejo que leí en un libro de autoayuda sonaba bien: «Haz solamente aquello en lo que sobresales, porque allí es donde te sentirás más satisfecho». El autor intentaba ayudar a sus lectores a crear la clase de vida que deseaban. No sé qué pensarás tú, pero si yo hiciera solo aquello en lo que me destaco, ¡no lograría mucho!

Visión eterna

El mes pasado, tuve buenas noticias del oculista: mi visión de lejos había mejorado. Bueno, pensé que era una buena noticia hasta que una amiga me informó: «La visión de lejos puede mejorar con la edad; la de cerca puede disminuir».

Su peor día

En mayo de 2011, una joven se refugió en una bañera durante un tornado que devastó la ciudad donde vivía. Su esposo la cubrió con su cuerpo y recibió los golpes de los escombros que volaban. Él murió, pero ella sobrevivió gracias al heroísmo de su marido. Como es natural, lucha con la pregunta: «¿Por qué?». Pero un año después de lo ocurrido, dijo que encontraba consuelo pensando que, aun en su peor día, se sintió amada.

¿De dónde vine?

El otro día, mi amigo afroamericano de siete años de edad, Tobías, me preguntó algo que me hizo reflexionar: «Si Adán y Eva eran blancos, ¿de dónde salió la gente negra?». Cuando le dije que no sabemos de qué «color» eran y le pregunté por qué pensaba que eran blancos, respondió que eso es lo que siempre veía en los libros de historias bíblicas y en la biblioteca. Se me partió el corazón. Me pregunté si eso lo haría sentirse inferior o que el Señor no lo había creado.

Un deudor

Se cuenta que, cuando era joven, a Robert Robinson (1735-1790) y a sus amigos les encantaba meterse en problemas. Sin embargo, a los 17 años, él escuchó un mensaje de George Whitefield, basado en Mateo 3:7, y se dio cuenta de que necesitaba que Cristo lo salvara. El Señor le cambió la vida, y se convirtió en predicador. También escribió varios himnos, entre ellos, el conocido Fuente de la vida eterna.