Cuando se trata de vivir por fe, hay una pregunta que sigue fastidiándome: ¿cómo sé que simplemente no nos estamos engañando a nosotros mismos? Todos sabemos de personas que han hecho algunas cosas bastante descabelladas en el nombre de la «fe». ¿Cómo sabemos cuando hemos cruzado la línea de la fe hacia la presunción?
Por la fe, Noé construyó un arca en una tierra árida; Abraham dejó su hogar sin tener un destino; y siendo una persona mayor, Sara se preparó para tener un bebé. Estos tres héroes de la fe saltaron y aterrizaron a salvo al otro lado del abismo. ¿Qué tienen sus historias en común? Bueno, Dios le dijo a cada uno de ellos qué habían de hacer. Él prometió, y ellos obedecieron.
Ocasionalmente, Dios nos llama a empresas inusuales. (Trata de ser un Noé y construir un trasatlántico en el Sahara). Cuando asumimos tales tareas, la familia se preocupa, los enemigos se burlan, y puede que los amigos cercanos se pregunten si hemos perdido la cabeza. Las empresas de fe desafían el pensamiento convencional. Pero la diferencia entre el llamado de Dios y el autoengaño es Su promesa.
Nosotros ponemos a prueba nuestra empresa de fe. Pero Dios ya ha prometido proveer aquello que estamos buscando. ¿Tienes necesidad de alimento y vestido? Dios promete suplirlos (Mateo 6:25-34). Pide con expectación.
¿Requieres de guía y sabiduría? Dios te dará lo que necesita (Proverbios 3:5-6; Santiago 1:5-7).
Estoy en medio de un arriesgado cambio de carrera que creo es un llamado de Dios. El dinero es una de mis grandes preocupaciones. Pero Dios ha prometido suplir para mis necesidades. Así que sigue adelante, Sheridan, y confía en Dios.
Examina las muchas referencias bíblicas a la fe y encontrarás que la mayoría de ellas no son del tipo de «tener fe para obtener lo que queremos», sino que son un aliento a tener fe en Él. La fe cristiana está cimentada en el carácter de Dios, y esto trae gran consuelo.
Podríamos malinterpretar — podríamos resbalar y caer en el abuso de Sus promesas. Pero si es así, caeremos en manos rescatadoras (Salmos 103:1-4). —SV