¿Cuál es tu refrigerio favorito? ¿Las papitas fritas? ¿Las galletitas? ¿Los dulces? ¿El chocolate, en cualquiera de sus formas?
Elisabet, una estudiante universitaria de segundo año, admite que el refrigerio que más le gusta comer después de clases es una orden bien grande de papitas fritas. Elisabet dice: «Las como todos los días. Es la comida de la que nunca me canso.»
Podemos dar gracias a Thomas Jefferson por traer el proceso de freír de Francia a América y brindar las papitas fritas a sus invitados de Monticello. Y podemos dar gracias a McDonald’s por popularizarlas en los años 60.
Pero, ¡un momento! ¿Papitas fritas grandes todos los días? Eso puede que no suene muy mal como refrigerio, pero, ¿y si la única comida que comieras todos los días durante 4 años de universidad fuera papitas fritas?
Ahora considera a los israelitas en el desierto de Sinaí. El Señor milagrosamente les daba todos los días un alimento llamado maná. Después de un año, ellos se
hartaron de la cosa esa y dijeron: «Pero ahora no tenemos apetito. Nada hay para nuestros ojos excepto este maná» (Números 11:6, BLA).
Aunque al principio podríamos solidarizarnos con los israelitas, considera que su queja iba dirigida a Dios. Y recuerda que era un milagro diario que tuvieran comida alguna. Todas las mañanas tenían maná fresco en el suelo a su alrededor. Era un regalo de Dios.
Sin embargo, ellos se quejaron.
¿Somos nosotros diferentes? ¿Nos cansamos de lo que Dios nos da día tras día?
¿Nos hartamos del mismo trabajo, la misma escuela, las mismas ropas, el mismo
ingreso? No es malo soñar ni trabajar para tener una vida mejor, pero ¿damos por sentada la provisión diaria del Señor? ¿Nos ofendemos por lo que tenemos?
Señor, ayúdanos a ver el milagro diario que es la manera en que suples lo que
necesitamos. Perdónanos por quejarnos. Danos un corazón agradecido. Amén.
—KD
R E F L E X I Ó N
■ ¿Cuál «maná» me ha estado dando Dios? ¿Cómo me ha cuidado en maneras
que me resulta difícil agradecer?
■ Cuando tengo ganas de quejarme, ¿cómo puedo impedir el mostrar falta de
gratitud al Señor?