Si sufres de paraskedvidekatriafobia, a lo mejor estés leyendo este artículo con una linterna debajo de tus cobijas.
Como puedes haber supuesto, paraskedvidekatriafobia significa «temor al martes 13». Parece una tontería tenerle miedo a cierto día en particular de una manera tan arbitraria. Y sin embargo, recuerdo claramente lo mucho que temía los días en que tenía que hablar en público en mi clase de oratoria, o cuando era el último día en que iba a tener la oportunidad de invitar a salir a una chica que
me interesaba, o cuando había un examen que tuviera que ver con números. Aquellos eran días que me ponían a sudar las manos.
Algunas personas están tan preocupadas por la convergencia del martes y la fecha 13 que tienen que visitar al psicólogo. Creen de verdad que es un día de mala suerte, por eso no pueden enfrentarlo sin ayuda.
Esta superstición es sólo una de muchas maneras extrañas de pensar que prevalecen en nuestra sociedad de hoy. Sé de un atleta que rehúsa comer otra cosa que no sea pollo el día que tiene que jugar. Otros se preocupan por los «números de la suerte» o por no pisar ciertas líneas en el campo de juego. Y están los que se tienen que sentar en el mismo asiento del banco todo el tiempo.
¿Hay algo malo en ello? ¿Cambia nuestra devoción a Dios nuestra perspectiva de las supersticiones? ¡Claro que sí! La obra de Dios entre su pueblo depende exclusivamente de su naturaleza, sus promesas, sus principios y su omnisciencia. Dios no está limitado por nada arbitrario ni por ninguna restricción que el hombre quiera tratar de imponerle.
En 1 Samuel 4 leemos que los israelitas pensaron que podían manipular a Dios
mediante el arca del pacto. «Si el arca está presente en la batalla —supusieron— Dios tendrá que darnos la victoria.» Pero Dios no está limitado por los caminos del hombre. Romanos 9 explica que son sus decisiones soberanas las que controlan las cosas, no las decisiones del hombre.
¿Eres supersticioso? Olvídalo. Que tu devoción sea para un Dios todopoderoso, no para una idea que no tiene poder. —DB
R E F L E X I Ó N
■ ¿Alguna vez me ha sucedido algo que pareciera ser consecuencia de un hecho
supersticioso? ¿Qué sucedió?
■ ¿Soy supersticioso acerca de algo? ¿De qué manera es la superstición contraria a la soberanía de Dios?