Un profesor de literatura infantil invitó a las compañeritas de clase de su hija, que están en cuarto curso, a participar en un debate sobre Pinocho con sus estudiantes universitarios. Los estudiantes se quedaron impactados al descubrir que los niños entendían la moraleja del clásico cuento infantil mejor que ellos.
¿Por qué? Porque, dijo el profesor, los educadores no han desarrollado la imaginación moral de toda una generación. «Los niños entendían mejor [que los estudiantes universitarios] la naturaleza y fuente de las tentaciones y los errores de Pinocho, y estaban menos dispuestos a excusarlo por la conducta que lo metía en tantos problemas y causaba tanta angustia a su padre» (Vigen Gurioan, «Tending the Heart of Virtue»).
El profesor cree que los niños nacen con un fuerte sentido de la moralidad. Disciernen rápidamente si el personaje de una historia es un tipo bueno o malo. «Esta necesidad de hacer distinciones morales es un don, una gracia, que los seres humanos reciben al principio de sus vidas. O bien se cultiva, o bien se deja morir.»
Yo no sé muy bien lo que la Biblia dice de todo eso, pero sí sé que los niños tienen un agudo sentido de lo bueno y lo malo. También sé, porque leo mucho a los niños, que naturalmente se inclinan a lo que es correcto. Es a medida que crecen cuando se borran un poco las rayas entre lo bueno y lo malo.
¿Por qué digo todo esto? Porque todos necesitamos examinar nuestros propios corazones para ver cuánto hemos aceptado los valores culturales degradados de nuestros días.
Una manera de mantener claras las diferencias podría ser leer literatura infantil de vez en cuando. También debemos leer la Biblia, el Libro de los libros. La misma establece un curso moral fundamentado en la verdad tal como sale del corazón deDios. ¡Y eso no es una mentira! —DE
REFLEXIÓN
■ ¿Qué cuentos infantiles recuerdo de mi niñez? ¿Qué historias bíblicas? ¿Cuáles son sus lecciones morales?
■ ¿Me resulta más difícil ahora ver las cuestiones morales claramente? ¿Discernir entre lo bueno y lo malo?
■ ¿Con qué frecuencia doy excusas para hacer algo que sé está mal? ¿Me ayudaría el leer a diario un capítulo de Proverbios?