En un programa de televisión sobre renovar casas, los televidentes suelen escuchar que la conductora dice: «¡Imagínalo!». Luego, ella muestra cómo quedaría con las cosas viejas restauradas, y las paredes y los pisos remodelados. En un episodio, la dueña de la casa estaba tan eufórica después de la renovación que brotaron tres veces de sus labios las palabras: «¡¡¡Qué hermoso!!!».
Uno de los asombrosos pasajes «¡Imagínalo!» de la Biblia es Isaías 65:17-25. ¡Qué deslumbrante escena de rediseño! Se muestra la nueva creación futura del cielo y la tierra (v. 17), y no es meramente cosmética; es profunda y real, y transforma y preserva la vida: «Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas. […]. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte» (vv. 21, 25).
Aunque los cambios previstos en Isaías 65 se producirán en el futuro, el Dios que obrará esa restauración universal está dedicado a cambiar vidas ahora. Pablo nos asegura: «si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas» (2 Corintios 5:17). ¿Necesitas una restauración? ¿Dudas, desobediencia y tristeza han estado arruinando tu vida? El cambio de vida en Jesús es real y hermoso, y está disponible para los que creen en Él y lo piden.