Romper las cadenas
Nos conmovió profundamente visitar Christ Church Cathedral, en Stone Town, Zanzibar, ya que allí se encontraba antiguamente el mayor mercado de esclavos de África Oriental. Los diseñadores del edificio quisieron mostrar con un símbolo palpable cómo el evangelio rompe las cadenas de la esclavitud. Ese lugar ya no sería un sitio de actos malvados y atrocidades horrendas, sino de la gracia manifestada de Dios.
¡Piensen seriamente en Jesús!
Si alguna vez hubo alguien fiel, ese fue el hermano Justice. Estaba dedicado a su familia, dedicado a su trabajo en el correo postal, y todos los domingos cumplía con su liderazgo en nuestra iglesia local. Hace poco, visité mi iglesia de la niñez, y sobre el piano estaba la misma campana que él usaba para avisarnos que el tiempo de estudio bíblico estaba por terminar. La campana había soportado el paso de los años, y, aunque hace años que el hermano Justice está con el Señor, su legado de fidelidad también perdura.
Entrenamiento in situ
Cuando la maestra de mi hijo me pidió que sirviera de acompañante en el campamento de ciencia, vacilé. ¿Cómo podría ser un ejemplo cuando mi pasado estaba manchado de errores; cuando todavía luchaba, tropezaba y caía en antiguos hábitos malos? Dios me ayudó a amar y criar a mi hijo, pero, a menudo, dudaba de que me pudiera utilizar para servir a otros.
El llamado de la sabiduría
Malcolm Muggeridge, destacado periodista y crítico social británico, puso su fe en Cristo a los 60 años. Cuando cumplió 75, brindó 25 reflexiones sobre la vida. Una decía: «Nunca encontré a un hombre rico que fuera feliz, pero pocas veces he encontrado a un pobre que no quisiera ser rico».
La fe de la viuda
Es noche cerrada cuando Ah-pi empieza su día. Otros en la aldea se despertarán pronto para ir a la plantación de caucho. La cosecha de látex es una de las fuentes de ingreso más importantes para la gente de Hongzhuang, en China. Para obtener la mayor cantidad posible, los árboles deben ser golpeteados muy temprano, antes de que amanezca. Ah-pi hará eso, pero, primero, pasará un tiempo en comunión con Dios.
Amnesia
Los servicios de emergencia en Carlsbad, California, rescataron a una mujer con acento australiano, que no podía recordar quién era. Como sufría de amnesia y no tenía identificación, no podía dar su nombre ni decir de dónde venía. Se requirió de ayuda médica y de los medios de comunicación para que recuperara la salud, contara su historia y se reuniera con su familia.
El lugar de espera
«Esperar que un pez muerda el anzuelo o esperar que el viento haga volar una cometa. O esperar que llegue el viernes por la noche […]. Lo que todos hacemos es, simplemente, esperar», dice el Dr. Seuss, autor de muchos libros para niños.
El secreto de la paz
Grace es una señora muy especial. Cuando pienso en ella, me viene a la mente la palabra paz. La expresión de calma y tranquilidad de su rostro ha cambiado en muy pocas ocasiones desde que la conocí hace seis meses, aun cuando a su esposo le diagnosticaron una enfermedad extraña y, posteriormente, lo internaron en el hospital.
Dios en los detalles
Cuando mi cachorro labrador «achocolatado» tenía tres meses, lo llevé a la veterinaria para que le pusieran las vacunas. Mientras ella lo revisaba con mucho cuidado, notó una pequeña marca blanca en su pelo, en la pata trasera izquierda. Entonces, sonrió y le dijo: «De aquí te sostenía Dios cuando te sumergió en chocolate».
A donde sea
Mientras echaba un vistazo a las viejas fotografías de mi boda, mis dedos se detuvieron en una de mi esposo y yo, recién declarados «Sr. y Sra.». Mi entrega a él se revelaba en mi expresión. Iría a donde sea con él.