Como he escrito muchos artículos y un libro sobre cómo enfrentar las pérdidas en la vida, tengo el privilegio de conocer a muchos que, como yo, luchan a lo largo de nuestra travesía en este mundo. Una de mis nuevas amigas es una mamá cuya hija de 21 años murió repentinamente en el 2009, lo cual la dejó desequilibrada. Me dijo: «Me siento como marginada del mundo normal. Estoy destruida y tengo el alma abrumada de tristeza».
En verdad, las pérdidas que experimentamos pueden derribarnos, ya sea que se trate de la muerte de un pariente, de un hijo que se aleja de Dios y de la familia o de alguna dificultad física o mental.
No obstante, lo que he descubierto es algo que el músico Jeremy Camp explicó en una canción que escribió después de la muerte de su esposa en el 2001: Cuando las dificultades te derriben, recuerda que «Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones» (Salmo 46:1). Esta es una razón suficiente para volver a levantarnos. Camp describió su lucha en la canción titulada Comprender. Preguntaba: «¿Por qué no puedo volver a levantarme?». Entonces, reconoció que podía hacerlo porque «sé que tú, Señor, comprendes todo».
Cuando los problemas nos derriben, podemos mirar hacia arriba. Dios está allí. Él nos comprende y se preocupa por nosotros. No es fácil, pero podemos confiar en que el Señor nos ayudará a volver a levantarnos.