Tony Bennett dejó su corazón en Nueva Zelanda y sabía que enía que volver. (No, no el Tony Bennett que te estás imaginando.) Este es un jugador de baloncesto que tiene muy buen tiro y cuyo padre, Dick Bennett, fue entrenador del equipo Wisconsin Badgers en el Cuarto Final de la Asociación Nacional de Atletas Universitarios (NCAA en inglés) en el año 2000. Después de una corta carrera con la Asociación Nacional de Baloncesto de los Estados Unidos (NBA en inglés) en el equipo Charlotte Hornets, Tony Bennett buscó la guía de Dios para saber cuál camino debían omar él y su esposa, Laurel. Y recibieron claras señales de parte de Dios sobre la forma en que debían proceder.
He aquí como Dios los dirigió:
Después que Tony salió del equipo de los Hornets, tuvo la oportunidad de unirse al equipo Cleveland Cavaliers para la temporada 1995-96. Pensaba que tenía buenas probabilidades hasta que se lastimó un pie y los Cavaliers «le dieron su pasaporte».Puesto que aún seguía interesado en otra oportunidad con la NBA, Tony decidió aceptar una oferta de un equipo de Sydney, Australia. Pensó que podría regresar jugando bien para el equipo Sydney Kings. Pero éstos lo despidieron a pesar de que tenía un promedio de 21 puntos por juego.
Entonces Tony y Laurel se preguntaron qué haría Dios después. ¿Adónde los llevaría? Al poco tiempo, un equipo de Nueva Zelanda lo contrató para que jugara en su liga profesional. Mientras estaba jugando para ese equipo, Tony yLaurel conocieron a un hombre que les ofreció oportunidades para trabajar en su ministerio. Su participación en el ministerio aumentó tanto que decidieron regresar el año siguiente a Nueva Zelanda a jugar y a servir a Dios como misioneros.
¿Cuál fue para los Bennetts el secreto de buscar la guía de Dios?
Según Laurel: «Seguimos preguntándonos dónde podíamos servir a Dios de la mejor forma. Oramos para ver claramente qué decisión tomar. ¡Dios lo hizo!
Tan cierto como que Dios guió a los hijos de Israel por una nube y fuego, nos guía a nosotros cuando confiamos en Él. —JDB