¿Usas botox? Mucha gente sí. Algunos se tratan con esta sustancia por cuestiones de salud, pero otros se lo aplican porque quieren volver a lucir jóvenes.
Para algunas personas, el aspecto es tan importante que se hacen inyectar la toxina botulínica tipo A para que sus arrugas desaparezcan por un período. Con el tiempo, el tratamiento debe volverse a aplicar.
El botox es costoso y tiene algunos posibles efectos secundarios. Sin embargo, esto no impide que algunas personas lo prueben para mostrarse mejor.
Desde luego que lucir bien no está mal, pero es mucho más importante nuestro aspecto interior. ¿Cuánto estamos dispuestos a sacrificar para tener un carácter hermoso?
¿Tenemos intenciones de usar un poco de «botox para el alma»: inyectarnos la clase de bondad amorosa, paciencia misericordiosa, interés solidario por los demás, amabilidad humilde y unidad de espíritu que pueden embellecer nuestra vida? (Efesios 4:2-3). ¿Estamos interesados en seguir recurriendo a Dios para que nos ayude a mejorar las cualidades espirituales que necesitamos?
¿Buscas maneras de lucir bien? Investiga la Biblia para hallar versículos que desarrollen el carácter. Luego, mediante la oración y el poder del Espíritu, inyecta en tu vida los rasgos piadosos que aparecen en esos pasajes. Los efectos secundarios son todos buenos.