Uno de mis vecinos es policía. Un día estaba persiguiendo a un auto en el que viajaban dos delincuentes sospechosos. Él y su compañero lograron hacer que el auto se detuviera al lado de la carretera y cautelosamente se acercaron a los dos sospechosos. Portando sus armas, cada uno de los oficiales abrió una
puerta del auto y apuntó a los hombres.
De repente, el oficial que estaba del lado del conductor del vehículo escuchó un chillido de ruedas y miró en la dirección de donde venía el ruido. Lo que vio fue un auto que venía ¡a toda velocidad en dirección a él! No pudo apartarse del camino y el auto lo golpeó fuertemente.
¿Quién estaba conduciendo ese auto? Un ciudadano preocupado que pensó que se había encontrado con un asalto a mano armada.
Nuestro vecino es policía secreto. El ciudadano confundió su pelo largo y desordenado, su manera de vestir y sus acciones amenazadoras y lo atropelló
pensando que estaba impidiendo un delito.
Al ciudadano preocupado no le presentaron cargos por ningún delito, pues los fiscales dijeron que cualquiera que observara la escena hubiera llegado a la misma conclusión. Simplemente se trataba de un caso de
identidad errada.
¿Alguna vez has tenido ese problema? ¿Alguna vez alguien te ha confundido con un no creyente? ¿Te distingue tu manera de actuar de los no creyentes de tu campus? ¿O te adaptas tan bien que nadie pensaría en acusarte de ser cristiano?
La época universitaria trae nuevas experiencias, y a menudo el cristiano joven se deja llevar por la emoción y las presiones de la vida universitaria. Si uno no se apoya firmemente en las Escrituras y en una dependencia diaria de Dios, es fácil convertirse en «uno del montón».
Pídele a Dios que te dé el valor de hablar en Su nombre con denuedo, que te dé
oportunidades de hablar a otros de Él, y que te diga qué decir cuando alguien te
pregunte acerca de la esperanza que tienes en Cristo Jesús (1 P. 3:15).
No seas víctima de una identidad errada. —CK
R E F L E X I Ó N
■ ¿Soy un cristiano secreto? ¿O saben mis amigos no cristianos y mis
compañeros de estudios lo que creo?
■ ¿Voy a vencer mis temores de no encajar bien o de que me tilden de fanático
religioso? ¿Cómo puedo permanecer fiel a Cristo?
■ ¿Tengo algunos amigos cristianos que puedan ayudarme a «estar firme en la
fe»? (1 Corintios 16:13).