¿La conociste ya? Es una de las personas más populares en los campus universitarios de los Estados Unidos hoy en día. Es la señorita Recato.
Un estudio reciente sobre la conducta de más de 275.000 estudiantes en 469 universidades de los Estados Unidos reveló que en 1998, hubo una cifra baja récord de los que apoyaban las relaciones sexuales informales entre los estudiantes de primer año.
Sólo 40% de los que se graduarán en el 2002 está de acuerdo con que está bien que dos personas que se gustan tengan relaciones sexuales, incluso si sólo se han conocido por poco tiempo. Esa cifra era 42% en 1997, y de 52% en 1987, cuando fue más alta que nunca.
¿Qué está pasando? ¿Por qué ahora es tan deseable andar con la señorita Recato?
Una escritora de 23 años de edad llamada Wendy Shalit cree que tiene mucho que ver con que las personas jóvenes están aprendiendo de los errores de la pasada generación. «Sus padres eran los que creían en la liberación por medio de la promiscuidad y la experiencia. [Pero algunos jóvenes hoy] están abrazando los códigos de conducta que sus propios padres rechazaron.»
No los puedes culpar. Algunos de los efectos que aún quedan de la revolución sexual son:
• El divorcio se ha vuelto más común que el resfriado común.
• Miles de adultos casados sufren de disfunción sexual por haber tenido relaciones sexuales antes de casarse.
• Se reportan cifras asombrosas de abortos y las enfermedades venéreas están muy difundidas.
Cuando miras estadísticas como esas, el recato y esperar hasta casarse se ven muy atractivos, ¿verdad?
Hay una razón. El plan perfecto de Dios para el matrimonio incluye la espera. En
toda la Biblia hay fuertes advertencias de Dios sobre los efectos de tener relaciones sexuales fuera del matrimonio (como Romanos 13:13). ¿Por qué? Porque Dios quiere que experimentemos la belleza de una vida pura en Cristo. El pecado, sobre todo el sexual, nos destruye a nosotros y a nuestros compañeros (véase la lista de arriba). El regreso del recato hoy es un reflejo de la profunda necesidad de estar en comunión con Dios, de formar parte de su plan perfecto para las relaciones sexuales y la vida. Algunos estudiantes entienden eso. ¿Los otros? Tal vez busquen a la señorita Recato porque la extrañan. —TF
R E F L E X I Ó N
■ ¿Qué pienso de las relaciones sexuales prematrimoniales? ¿En qué me baso?
¿Cómo puedo evitar caer en una relación promiscua?