Diario UniversitarioEl profesor de historia entró en el salón de clases inmerso en una nube de arrogancia. Él era el profesor; nosotros éramos la escoria ignorante de la tierra que se había inscrito en su clase, la cual era un requisito.

Él no sólo sabía mucho, sino que también sabía que sabía, y supongo que eso era lo que más me irritaba. Tal vez esa sea parte de la razón por la que reaccioné tan fuertemente un día cuando habló de Jesucristo.

Este profesor trató a la Biblia como si fuera un mito. Repasó superficialmente la vida de Jesús y se refirió a Él como a uno de tantos supuestos mesías. La charla del profesor dejó a Jesús en la tumba, sin mención alguna de su resurrección.

Yo no lo pude soportar, por eso levanté la mano y pregunté sobre la resurrección de Cristo y su singularidad. ¡Parecía que había difamado a la mamá del profesor! Se embarcó en una perorata verbal hasta que terminó la clase.

Puede que yo no haya manejado la situación muy bien. De hecho, mirando atrás me doy cuenta de que pude haber hecho la pregunta en una forma menos amenazadora. Y pensando en la situación, sé que me podía volver tan arrogante sobre mi conocimiento de Cristo como era el profesor de arrogante sobre su ignorancia de Él. Es en esas situaciones cuando me siento tentado a usar mal la afirmación: «Más que todos mis enseñadores he entendido» (Sal. 119:99).

El salmista no se estaba burlando de profesores impíos. Más bien se regocijaba de las ricas verdades de la Palabra de Dios. Sabía que al estudiar la Biblia por sí mismo adquiriría el conocimiento más importante de la vida. Y no estaba siendo arrogante, sino que tenía una serena confianza en que la mejor instrucción que podía obtenerera mediante su estudio personal de la Palabra de Dios. Y yo me pregunto: ¿qué tan listo eres?  —KD

REFLEXIÓN

■ ¿He escuchado a algún profesor no cristiano difamar a Jesús o burlarse de la Biblia? ¿Cómo respondí en pensamiento y acción?

■ ¿Tengo la confianza de que la Palabra de Dios es verdadera? ¿De que Jesús es el Hijo de Dios y Salvador de la humanidad?