Muchas personas místicas, espiritistas y ocultistas no cristianas han desarrollado sus propias opiniones acerca de la vida después de la muerte sobre la base de visiones personales. Aunque algunas de estas experiencias pueden haber sido transformadoras y personalmente significativas, los relatos de esas experiencias no necesariamente son fuentes confiables de información respecto a la naturaleza de la vida después de la muerte.
La gente que se aleja demasiado de la fe bíblica tratando de confirmar personal y experimentalmente la naturaleza de la vida después de la muerte tiende a caer en el ocultismo. Por tanto, a cualquiera que llegue a estar profundamente influenciado por estos relatos le ofrecemos esta advertencia bíblica: “… aun Satanás se disfraza como ángel de luz” (2 Corintios 11:14). Las Escrituras deben seguir siendo la norma por la cual se evalúen esos relatos.
Escrito por: Dan Vander Lugt